Una breve historia del vocoder

Quizá le sorprenda saber que los voders y vocoders se remontan a 1939 y 1940, respectivamente.

Homer Dudley, un físico que trabajaba en los Bell Laboratories de Nueva Jersey, desarrolló el Voice Operated reCOrDER (“grabadora operada por voz”) como equipo de investigación. Originariamente fue diseñado para probar diseños de compresión para la transmisión segura de señales de voz a través de líneas telefónicas de cobre.

Se trataba de un dispositivo compuesto, formado por un analizador y un sintetizador de voz artificial, del siguiente modo:

El analizador detectaba los niveles de energía de muestras de sonido sucesivas medidas a través del espectro completo de frecuencias de audio, usando una serie de filtros de banda estrecha. Los resultados del análisis se podían visualizar gráficamente como funciones de frecuencia sobre el tiempo.

El sintetizador invertía el proceso explorando los datos del analizador y enviando los resultados a una serie de filtros analíticos conectados a un generador de ruido. Esta combinación generaba sonidos.

El voder se expuso en la Feria Internacional de 1939, donde causó gran sensación. En la Segunda Guerra Mundial, el vocoder (entonces llamado VOice enCODER) tuvo una gran relevancia, ya que procesaba las conversaciones transoceánicas entre Winston Churchill y Franklin Delano Roosevelt.

Werner Meyer-Eppler, el director de Fonética de la Universidad de Bonn, reconoció la importancia de las máquinas para la música electrónica, tras una visita realizada por Dudley en 1948. Meyer-Eppler utilizó el vocoder como base para sus futuras obras que, a su vez, se convirtieron en inspiración para el movimiento alemán “Elektronische Musik”.

En la década de los 50 se sucedieron diversas grabaciones.

En 1960, se desarrolló el sintetizador Siemens en Munich. Entre sus múltiples osciladores y filtros incluía un circuito de vocoder basado en válvulas.

En 1967, una empresa llamada Sylvania diseñó varios equipos digitales que usaban el análisis de señales de entrada basado en tiempo, en lugar del análisis basado en el filtro de paso de banda.

En 1971, después de estudiar la unidad de Dudley, Bob Moog y Wendy Carlos modificaron diversos módulos del sintetizador para crear su propio vocoder para la banda sonora de La naranja mecánica.

EMS, la empresa de Peter Zinovieff en Londres, desarrolló un vocoder autónomo y mucho más portátil. EMS es probablemente más conocida por los sintetizadores Synthi AKS y VCS3. El EMS Studio Vocoder fue la primera máquina disponible comercialmente, presentada en 1976. Posteriormente fue rebautizada como EMS 5000. Entre sus usuarios estaban Stevie Wonder y Kraftwerk. Stockhausen, el pionero de la “Elektronische Musik” alemana, también usó el vocoder de EMS.

Sennheiser fabricó el VMS 201 en 1977 y EMS lanzó el EMS 2000, que era una versión reducida de su hermano mayor.

En 1978, el vocoder comenzó a disfrutar de un uso cada vez más generalizado y obtuvo una gran popularidad gracias a su uso en la música de Herbie Hancock, Kraftwerk y otros muchos artistas. Entre los fabricantes que se pasaron a la producción de vocoders en aquella época estaban Synton/Bode, Electro-Harmonix y Korg, con el VC-10.

In 1979, Roland lanzó el teclado ensemble/vocoder VP 330.

El vocoder vivió sus días de mayor apogeo a finales de los setenta y principios de los ochenta. Artistas como ELO, Pink Floyd, Eurythmics, Tangerine Dream, Telex, David Bowie, Kate Bush y otros muchos utilizaron el vocoder.

Desde el punto de vista de la producción, los vocoders podían (y todavía pueden) encontrarse en forma de kits de bajo coste en tiendas de electrónica.

Desde 1980 hasta la actualidad, los principales abanderados del estandarte del vocoder fueron (y continúan siendo) EMS en el Reino Unido, Synton en Holanda y PAiA en Estados Unidos.

En 1996, Doepfer en Alemania y Music and More se unieron a la cofradía de productores de vocoders.

Desde los últimos años de la década de los noventa hasta la actualidad, han aparecido diferentes vocoders de software, independientes e integrados, como el EVOC 20.